La casualidad

Mi mente ya no lo recordaba
si no fuera por ver su imagen en mis ojos,
ya no hacia imaginación de aquella persona,
pero ese día, ese día estaba esperando el autobús
una tarde mas cualquiera como esta,
sentada en la parada, con los auriculares en mis orejas
mientras se escuchaba "Copenhague"
cerré los ojos para inspirar fuertemente, porque no fue un buen día,
en esa inspiración olí tu olor, mi nariz hizo contacto con mi celebro
y recordó tu olor,
abrí bruscamente los ojos lo mas rápido posible
y en ese momento vi un pie, con un zapato,
por no decir igual que los que tu siempre llevabas en esas tardes de invierno.
En ese momento mi curiosidad y entusiasmo
pudo con todo deje todas mis cosas en esa parada
y busque a ese chico con esos zapatos,
no iba mas de 1 metro de mi de distancia,
me acerque, grite tu nombre, al no percivir respuesta, grite más fuerte y en ese mismo instante mi móvil
sonó lo vi, lo volví a ver,
y lo deje sonar con su música de "Copenhague"...
creo que mi corazón le dio una bajada de tensión en ese momento
y no tuvo fuerza de cogerte el teléfono.

Ese día no paro de sonar el teléfono,
y no paro mi corazón de fallecer.

La imaginación

Su sonrisa habló con la mía
el giro su cabeza relajado
yo agache la cabeza y en ese momento
la gire bruscamente hacia la derecha,
mi cara desencajada,
pronunció su nombre,
el rápidamente se giro hacia mi
y lo más rápido que pudo cogió mi brazo
y me dio un gran tirón yo me deje llevar,
en ese momento mi corazón se paro bruscamente
no siguió latiendo y solte el suspiro más intenso y corto que nunca más se repetira ,
en ese mismo instante me dio un abrazo y me pregunto repetidamente si estaba bien,
al ver que no contestaba me miro a los ojos mientras me agarraba de la cara,
yo quise esquivar su mirada, pero al momento que la mire solté un leve Si
que salio de mis entrañas mas asustadizas.
El consiguiendo respuesta me volvió a abrazar
mi cuerpo sintió su corazón acelerado y quiso seguir a su ritmo...
Solo recuerdo silencio en esa calle llena de gente, hasta que el paro ese silencio diciendo:
-Tu corazón
-Ya... (respondí)

Y a partí de ese día mi vida cambio de perceptiva
o por lo menos se hizo menos empinada de lo común.