Tan solo seremos libres, cuando no tengamos nada más que perder.

04 junio 2011

Esta vez será mejor marcharse...

Se le había quedado encallado el frio de esa misma noche en su cuerpo, y a cada escalofrío recorría su ser como látigo que ataca sin ser escuchado. Y creo que esa misma noche se convirtió en piedra, en roca, en hielo que nunca puede ser derretido. En ese mismo instante todo lo que fue, pareció pura fantasía y pura mentira de aquel país que preferimos no hablar, por eso todo se rompió sin necesidad de volverlo a unir, lo único que hizo es irse de aquel lugar y dejar aquellos trozos ayí. Su mente estaba bloqueada en pausa y por un momento echo marcha atrás, y es que ya no tenía miedo que todo eso más todos ellos, se convirtieran en el recuerdo de un recuerdo, o ni siquiera eso, que no tenía miedo que un día cualquiera, quisiera recordar y le costara mucho tenerlo presente. Y es que no tenía miedo a eso, ni a nada. Ya no. Lo único que pasará es una sonrisa o un leve mal recuerdo cada vez que vea una imagen, un olor o una simple canción de todo aquello, de todos ellos.
Ya no, ahora no. Nunca si.




Ya no puedo esperar ni a nada ni a nadie, el tiempo a mi no me espera y se me van las horas muertas en buscar en vuestros vació.