Tan solo seremos libres, cuando no tengamos nada más que perder.

24 septiembre 2013

Duerme.

Las seis de la mañana oliendo a café con ojos inyectados en ojeras,
la luz mataba y el sol incendiaba ¿ tanto frío, para que?
Azúcar de más para cuerpos salados,
malas ideas para cabezas sin sueño.
Las nubes tan lejos de esta ciudad
y los relámpagos tan cerca de ti.
Mesas que callaban abismos
acompañadas con sillas que gritaban al rozar.


"Buenos días" decías,
mientras te acurrucabas en sus hoyuelos
y te mecías en sus palabras,
para intentar de una vez dormir.