Tan solo seremos libres, cuando no tengamos nada más que perder.

30 julio 2013

Hold On.

Se había cerrado hacía el vacío, 
la muerte le rebato la vida pero no la respiración, 
se estaba convirtiendo en agua destilada donde las mezclas allí no existían,
( odiaría convertirse azul para luego ser absorbida y quedase sin luz ).
El impar se estaba volviendo par, algo que en ocasiones odiaba
y en otras se estremecía, pero no de felicidad.

Incidía para luego alejarse, 
masticaba las palabras una a una para luego servírtelas en bandejas calientes,
 y no querer saber nada de su sabor.
Y así empezaba su huida en puntillas, porque ya no tenía prisa.